jueves, 26 de marzo de 2009

Búscame en Google, baby

Para ser alguien con sueños de escritor y amante feroz de la literatura, su crítica y sus personalidades, tengo muy pocas relaciones dentro del medio. Probablemente porque durante muchos años me negué a aceptar y difundir mi abierto gusto por escribir. Estudiar números y fórmulas en lugar de letras y frases no fue tan malo, pero mis amigos de la vida terminaron siendo casi todos ingenieros, científicos, arquitectos y en general, gente del perfil de ejecutivo mediano para arriba. Pocos humanistas, artistas y menos de los autoproclamados intelectuales.

Es por ello que disfruto mucho chatear con J.R., una gran amiga intelectual que de alguna manera encuentra mi plática lo suficientemente pasable para seguir teniendo contacto conmigo después de casi...¿siete años? ¿ocho?. Algo así.

Jo, como yo la llamo, es alemana y trabaja en una Universität en su país. Es experta en muchas cosas y en blogs militares, lo que sea que eso signifique. En realidad hablamos muy poco de trabajo. En la gran mayoría de las ocasiones comentamos sobre nuestros días en la oficina, o el fin de semana, o las noticias. Es de mis pocas amistades que pueden entender una broma contrastando a Chavez y Musharraf. Y es creo que la única persona de primer mundo que conozco que no le remuerde la consciencia hacer una broma pesada sobre mi condición tercermundista y temer que le retire la palabra de por vida; tampoco tiene problemas en llamarme racista cuando hago un comentario del tipo "los hindués huelen feo". Nos salva el hecho de la distancia y que realmente nos respetamos bien. Es rara porque es alemana y agradable en ocasiones. Y así se lo he dicho.

Pero en algún momento indagué más sobre sus escritos, publicaciones, colaboraciones y demás. Le pregunté si tenía un blog o algo así. Su respuesta me hizo sentir tan estúpido que no me queda más que reproducirla: "just Google me, baby" me dijo con la paciencia de una intelectual rebajando su nivel para un antropófago africano. ¿Quién pregunta hoy en día sobre el background de alguien si para ello existe Google?

Encontré entonces sus papers, blog y otras colaboraciones. Noté muchos de los capítulos en que había participado en diferentes libros y leí algunos.

Luego hice lo lógico consiguiente: tecleé mi nombre en Google y mi ego saltó. Colaboraciones en algo que tenía años de no hacer, menciones en cosas que ya ni recordaba. Fotos que retrataban a este blogger con más kilos de inocencia encima. Pensé en lo dicho por Jo, "just Google me, baby" y me pregunto si algún día tendré la estatura intelectual y la personalidad necesaria para decir eso a alguien.

Y sobre todo, ¿a quién se lo diría?

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